Según la OMS en la década de los 60 del siglo pasado, la rehabilitación cardiaca es un “conjunto de actividades necesarias para asegurar a los enfermos del corazón una condición física, mental y social óptima, que les permita ocupar por sus propios medios un lugar tan normal como les sea posible en la sociedad”.
La fisioterapia cardiaca se encarga de la prevención, tratamiento y mantenimiento en personas afectadas por patologías y enfermedades del corazón y en aquellas personas que, sin patología, presenten suficientes factores de riesgo como para padecerla o necesiten empezar una actividad física de manera controlada.
Dentro de los programas de rehabilitación cardiaca propuestos se centra en la formación e información de hábitos de vida saludable y disminución de los factores de riesgo asociados, así como en la implementación de un programa de ejercicio terapéutico en las diferentes fases (desde pre-operatoria hasta post-operatoria) por las que puede pasar una persona con patología cardiaca.
